sábado, 29 de septiembre de 2012

Los siete errores

A ver si encontráis los siete errores en este artículo de Juan Forn en Página 12, que por lo demás es excelente en lo literario, aunque guste a veces de superar el 'basarse en hechos reales'.

Y me servirá de prueba para ver si alguien se pasa por este blog y tiene un interés -quizá enfermizo, no sé- por FO'C: os espero en los comentarios.

9 comentarios:

Diego dijo...

Yo paso por este blog, pero estoy demasiado lejos de ser experto (siquiera de llamarme "conocedor"). Espero las respuestas.

Ángel Ruiz dijo...

Dejando de lado que el pie de foto (si es la foto que se ve en la web la misma que el artículo en papel) no corresponde a Lourdes (es ella en su casa debajo de un autorretrato suyo) y que es un poco excesivo decir que se estaba muriendo desde los 25 años cuando se murió a los 39.
El primer error es decir que llegó a una 'residencia de escritores' en Iowa: fue a hacer un Master y vivía en una pensión. Se le ha cruzado el dato de Iowa con el de Yaddo.

Y decir que no sabía entonces quiénes eran Kafka y Joyce es excesivo: no los había leído, pero esa es otra cuestión.

Ángel Ruiz dijo...

Error n. 2:
"Días después, cuando leyó su primer cuento allá, dejó a todos en atónito silencio; en las horas siguientes se fueron acumulando manojos de flores silvestres en la puerta de su cubículo, que manos anónimas habían ido dejándole sin decir palabra".

No he visto en ningún sitio un relato de eso. Me parece que es pura invención, salvo que alguien me dé un testimonio sobre ello.

Marcela Duque dijo...

Ahora que empiezo a leer a Flannery, empiezo a leer a fondo el blog. El hecho de que se me haya escapado por completo la frase «The trees were full of silver-white sunlight, and the meanest of them sparkled» me tiene descorazonada como lectora. Aún no tengo una opinión muy formada, pero supongo que son ese tipo de pinceladas las que hacen de ella una gran escritora (a pesar de sus malos lectores, como yo).

Ángel Ruiz dijo...

Bueno, yo también soy de los malos lectores (es decir, de los que leemos deprisa). Tarde años en darme cuenta de frases como esta (y porque lo comentaban otros).

Dal dijo...

Creo que lo que solía leer por las noches era la Summa Theologica, no el breviario.

Te leo de Pascuas a Ramos, pero te leo.

Ángel Ruiz dijo...

Sí, también este blog es de Pascuas a Ramos.
Y leía el Breviario. Y la bobada a continuación de que no leía la Biblia es otro error más que podemos poner en la lista.

Juan Retamar dijo...

Y también la Summa, cada noche, según cuenta ella misma en sus cartas

Ángel Ruiz dijo...

Sí, Juan, aunque he leído a uno que dudaba de que fuese literalmente así; pero leía a santo Tomás diariamente. Se definía a sí misma como "tomista de pueblo".